octubre 21, 2010

Santiago de Chile – De putas y otras yerbas – 1116 horas

Un seudoamigo argentino, pensó que mi pesar se curaba con dinero.

- tenéme un asadito listo ché, que te caigo a las 10 con unas minas.

Como ni argentinos ni uruguayos podemos atentar contra la naturaleza, las 10 se hicieron las 12.30 y en el intervalo, un Arguile de Rosas y un clásico Absolut Pera con tónica y naranja, mataron el tiempo de espera.

Alguna de las buenas cosas que se me reconocen es ser un excelente anfitrión, así que para la cita a ciegas, Ismael no pudo ser diferente a como seria al recibir a Jelena e Ivan, la Pepi y Oscar, o Ramón e Isabel.

La cabaña lucía impecable como siempre, con cambios que los invitados no podrían jamás reconocer.Las semillas con pasas, el queso y el fiambre estrenando las tablas de caoba y plata 950 recién traídas del Imperio Inca, aceitunas negras recién arrancadas de mi huerto, un riquísimo olor a rosas en el aire y un asado a fuego lento en la terraza.

El atardecer había sido esplendido, cuando no! y la noche se presentaba fresca pero clara y rica. Tiempos disfrutados totalmente a solas por supuesto.

La estufa dejaba danzar sus llamas lentamente y las medias luces de los dormitorios empapados en aceites vaporizados de Sándalo, parecían un escenario de cuento de hadas para después del jacuzzi que brillaba listo.

Llegaron las visitas, cada una armada de su pipa de marihuana y aceptando con sus ojos lo que su boca decía sobre que habían fumado todo el día.
Niñas de 22 años, con cuerpos afortunados, risa fácil, pose adecuada a la profesión más vieja del mundo y labia de Puente Alto (con todo respeto).
Dijera la Pepi, “las de la winsha e la shala”


El argentino de ojos lascivos disfrutaba los quiebres que mi buena música provocaba en aquellos cuerpos y para variar, yo corría de un lado al otro, para atender las visitas, como si se tratara de una misión gubernamental o un cierre de grandes negocios.
Tuve la lucidez al menos, de definir que no era necesario poner platos para la cena (menos para lavar hoy) y picamos algo de lomo vetado y chorizos, argentinos claro, al medio de la mesa.
La rosca estaba tan pasada, que si bien cumplí los sueños de todos (cuando no) al servir los tragos solicitados con inquisidora rareza para ponerme a prueba, ellas, nunca pudieron tomarse uno entero.

Supieron hacer su show, probé que la mesa del living puede soportar hasta tres personas perfectamente bailando encima (hoy tuve que limpiarla y pasarle lustramuebles) y el ambiente se iba armando, pero yo desconocía la dirección.Probé también, que si bien las palabras contínuas al principio eran “- relájate poh webon”, todos coincidimos al final que nadie estaba mas relajado que yo, ni consciente , por supuesto.

Es que era una inauguración.
Era como perder la virginidad.
Quien imaginaria que un hombre con mi historia, venía a tener su primera experiencia con Putas casi rozando los 40 y en su catedral de la montaña.
Creo que puedo manejarme bastante bien con el sexo opuesto, pero con putas, me declaraba incompetente, y dada la experiencia, es cosa que no quiero aprender.

Las niñas estaban sorprendidas, reconocían por primera vez como se siente el “calor de hogar” que tantas veces les habrán leído en libros de cuento; y haciendo caso de tanto insistente pedido, el jacuzzi puso a llenar sus aguas y sus burbujas.
Yo era el único que seguía disfrutando de mi trago, mientras todos pedían agua a gritos para apagar el incendio que las pipas seguían encendiendo. Pero en casa no hay TV, ni radio, ni diarios, ni agua. Son esos deseos que no puedo cumplir.

¿Para que les cuento detalles?
Basta con resumir (dijera Arjona) que de los 6 escasos condones que había en la casa, no se abrió ninguno; y que yo fui el único que disfrutó el jacuzzi, las velas y el olor a Sándalo.

Las niñas no pudieron cumplir su misión profesional, no la de llevarnos a termino, ni siquiera la de provocarnos mayores trastornos hormonales.
Una dormito un rato su estado, otra trataba de descifrar en su cabeza llena de humo como podía provocar a aquel tipo de la montaña.


Debo aceptar y aclarar, que hice lo que estuvo a mi alcance, pero no alcanzo ni para mí.
El resultado, para variar, fue que alguien más se fue de casa con una nueva realidad aprendida (el calor de hogar existe!!), dejándome reiterados 10 de calificación.
Yo volví al jacuzzi a terminar mi trago, hasta que las velas se consumieron y mis sabanas de 400 hilos egipcios me recibieron y me elevaron a los brazos de Morfeo (es un dicho, no hubo tal tipo en casa) para despertar hoy muy temprano y sonreír nuevamente por un bello día mas en la montaña.

Lo único que me indica que realmente lo de anoche paso, es que hoy tengo dos juegos de sabanas que lavar - por el rose, no por las manchas - ; algo de vajilla ya fregada en la cocina y el jacuzzi, que merecidamente hay que retocar con cloro para cuando vuelva a usarlo, yo.


EPíLOGO: Hoy me llamo el amigo argentino. Parece que “mi chica” casi llora de impotencia por no saber que hacer con un “hombre tan grande!!”. Estoy suponiendo que la niña solo puede referirse a mi edad y además que los clientes de los puteros en Chile deben ser todos menores de 30, con la cara de Brad Pitt y cuerpo de guerrero espartano. También me reprochó e insistió, en que debía aprender a tratar a las putas como lo que son, no como mujeres. Que qué pensaba yo cuando había preparado la casa de esa forma y que el “calor de hogar” no es sentir común para estas chicas, lo cual bloqueaba sus capacidades profesionales. Vivir y aprender.

4 comentarios:

  1. jajjajajjajaajja Ay mi querido Ismael !!! Si de verdad no te conociera tanto....no sabría que lo que has narrado, es totalmente cierto.
    Beso. Tania.

    ResponderEliminar
  2. El final que importa, para los efectos, disfrutaste de la compañia y ya....y si pues, eres un caballero de aquellos!!!!
    ARF

    ResponderEliminar
  3. JAJA TU SIGUE QUEMANDO ETAPAS ...

    ResponderEliminar
  4. te felicito por seguir siendo VOS MISMO en cada escenario.
    Esa sensacion de autofidelidad no te lo roba nadie.
    Te acompaño una vez mas en sentimientos
    cdm

    ResponderEliminar