febrero 14, 2016

Antonio: ¡Cosas de dios! en una mano 5 dedos y en la otra 3 y 2

¡Qué bueno llegar a tus años Antonio! cuando las miradas que nos dicen "pobre viejo" no lastiman y los aplausos, incluso los sinceros, no ensanchan el ego, solo acarician el alma.

¡Qué bueno llegar así! con una cuota de inocencia que se llega a escapar por los ojos cuando no los ocupa la picardía, con tantas preguntas como cuando eras mozo, seguro de todo ‎lo que sale de tus manos y lleno de dudas sobre lo que mueven las manos de los demás. 
Y aun así, sonriendo, incrédulo sobre "que les puede pasar"

¡Qué bueno sentarme a tu mesa! esforzarme sin siquiera alcanzarte en tu ritmo de prosa, rebosante de la sabiduría más pura: la que se suda por los poros de la piel curtida pero suave por haber sido amada y se amasa en las manos gruesas del que supo empujar sin olvidar persistentemente acariciar.



Pusiste tu tinto en mi copa, tus gambas en mi plato y tu mano en la mía, mirándome por sobre los espijuelos pequeños para guiñarme un ojo y confirmar:  ¡nos vemos el jueves!.

Me llevaste a tu guarida de turno, me compartiste tus secretos y me pagaste un canario reluciente en vaso de tosco cristal.
Sonreímos, escuchamos, compartimos y hasta lagrimeamos por unos segundos.

¡Qué bueno seguir sintiendo Antonio, aunque duela!
¡Qué bueno a pesar de todo,  seguirnos preguntando que hicimos mal y que bien,  por qué no! esa rebeldía insoslayable que sigue haciéndonos temblar las rodillas,  rodillas que solo se aquietan al influjo de las manos firmes, que no las dejan salir a pelear una pelea más, una más aunque sea para parar el tiempo, para volver atrás, limpiar lo que sea que nos quedó empolvado en nuestras almas de padre y volver para que todo lo que no hicieron bien nuestros hijos, vuelva a brillar.

Qué bueno encontrarte, que bueno saber que estas allá y que cuando vuelva a la madre patria, tu aprenderás truco y yo Sarangollo, nos marearemos entre canarios y verdejos y pensaremos: ¡pobrecitos!, cuando nos miren extrañados al girar nuestras manos de hombre en el aire y te siga al decir " Cosas de dios...en una mano 5 dedos...y en la otra, 3 y 2"